Saboreando las Roscas de San Tirso de Abres

Resultado final

Estas son las auténticas Roscas de Jueves Santo recién salidas del horno y listas para degustar; con la peculiaridad que se pueden comer incluso después de 15 días, puesto que no se estropean.

Una muestra del producto más cocido y menos cocido, dependiendo del gusto del consumidor.

Elaboración de las Roscas - Paso 6

Seguidamente se meten en el horno

Se mueven una vez solamente con un rodo (herramienta de madera que se utiliza para mover las roscas en el horno), comprobando que se despeguen de la base del horno. El tiempo de cocción durará entre 20 a 25 minutos, retirándolas del horno y colocándolas en una mesa con cuidado de que no se rompan.

Elaboración de las Roscas - Paso 5

Una vez listo el horno se hacen las roscas

Se pintan con huevo batido

Elaboración de las Roscas - Paso 4

El horno se barre con vasallos (escoba compuesta por una haz de ramas flexibles o filamentos de otro material sujetos normalmente al extremo de un palo o un mango largo), el primer vasallo es una escoba hecha con laurel y el segundo vasallo es una escoba hecha con un saco mojado en agua. En el ruido que hace este vasallo se sabe si el horno está fuerte para que suban y cuezan bien y suave para que no se quemen.

Retirando las brasas del horno

Elaboración de las Roscas - Paso 3

Después se saca la masa de la artesa y se coloca en unas cestas, que llevan una manta por debajo y con una sábana espolvoreada con harina por la parte de arriba; sin olvidarnos de hacerle a la masa en el centro la señal de una cruz con la mano. Posteriormente abrigamos bien la masa (con la sábana y la manta), con mucho cariño como si fuera un bebé, en un sitio con temperatura agradable y sin corrientes.

Se espera hasta que se vea que la masa empuja la ropa hacía arriba (más o menos de 6 a 7 horas y a veces más), cuando llega este punto se enciende el horno de casa y se va calentando uniformemente estirando la brasa, con menos calor que para cocer el pan.

Elaboración de las Roscas - Paso 2

La preparación:

Diluir la levadura y la sal en un poco de leche. Con la harina colocada en la "artesa"(cajón que se va estrechando hacia el fondo, que se usa sobre todo para amasar pan) se hace una forma de volcán, en el centro se van echando todos los ingredientes, se amasan, y se sigue añadiendo harina hasta que consigamos una masa ni demasiado blanda ni demasiado dura, tiene que estar muy trabajada y se debe de amasar al menos durante dos horas.